Noche prevista en Bracciano, ya en la antesala de Roma









La jornada de este jueves, cuarto día de las andanzas en bicicleta de nueve sorianos entre Soria y Roma, tiene prevista su finalización en Bracciano en algún momento de la noche, para afrontar en la mañana de este viernes 25 de mayo el último tramo del trayecto, el que dejará al grupo en la Ciudad Imperial
La crónica de ayer miércoles terminaba ya en Italia, y más concretamente en Imperia, muy cerca de San Remo. Allí empezaron a dar pedales Mítxel y Javi, en una etapa que finalizaba en Cogoleto, cerca de Génova, ya en plena noche. El resto del grupo, mientras tanto, iba avanzando en autocaravana y furgoneta, comiendo, descansando lo que se puede, organizando el resto de la ruta…
Poco después, todavía antes de la medianoche, se produjo el principal cambio del itinerario previsto. Inicialmente, no se tenía planeado entrar en la ciudad de Génova, sino rodearla. Sin embargo, y aprovechando que ya estaría más adelantada la noche y que el tráfico no sería tan intenso, Rafa y Paco han hecho una etapa muy larga para reunir dos tramos en uno, desde Cogoleto hasta Sarzana, muy cerca de La Spezia, donde han llegado después de más de siete horas de pedales a muy buen ritmo a pesar de los constantes subes y bajas.
En La Spezia, el reto ha abandonado Liguria y ha entrado en una de las regiones con más personalidad de Italia, lo que ya es mucho decir: la Toscana, allí donde se concentran Florencia, Pisa, Empoli, Lucca, Grosseto, San Gimignano… aparte de numerosas otras localidades de interés y unos paisajes espectaculares.
Este primer tramo en la Toscana lo han disfrutado María y Santi, el disfrute que permite un viaje en bicicleta sin paradas, apenas interiorizando sensaciones a través de lo que entra por los ojos y por las piernas. Como casi siempre por el centro de Italia, al final ha sido inevitable el trasiego de cuestas, acentuado hoy por el calor que empieza a apretar.
Su tramo, de unos 120 kilómetros como es habitual, ha terminado en Castelfiorentino. Allí han regresado de nuevo a sus monturas Javi y Mítxel, con un objetivo diferente al inicial para intentar cuadrar horarios. Tienen planeado hacer unos 150 kilómetros hasta Santa Fiora, otra de las incontables preciosas localidades de Italia en las que descansa el resto de la expedición salvo la furgoneta de apoyo. Si el calor y los kilómetros acumulados no lo permiten, los que ahora descansan retrocederían una parte.
De Santa Fiora a Bracciano hay unos 140 kilómetros. Los planes también han sido variados en este punto, y las dos parejas que no pedalean en este momento se dividirán estos 140 kilómetros, o los añadidos en caso de retroceso, en dos sectores tan iguales como se pueda.
En algún momento de la noche, como se ha dicho al comienzo, el último relevo de hoy tiene planeado llegar a Bracciano. Antes, Mítxel y Javi alcanzarán el final de su última etapa como pareja, mientras que el penúltimo relevo completará ese primer sector citado, la mitad de los kilómetros que faltan ahora mismo hasta Bracciano, ya en la región del Lazio, la tercera y única que visitará este viaje.
En Bracciano, después de cuatro días frenéticos de deporte, sueño y planificación, el grupo se tomará el primer respiro desde que comenzó a funcionar, para hacer mañana el último tramo hasta Roma junto al concejal de Deportes del Ayuntamiento de Soria, Ángel Hernández, ya que uno de los retos de esta aventura es recordar todo lo que unió hace más de dos milenios a Roma y a Numancia, para tratar de refrescarlo.

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